Las aventuras de un Montapuerco y su Harem de Flechas
Erase una vez un montapuercos muy feroz, valiente y a la vez inútil, cada vez que cruzaba la arena moría en cuestión de segundos, no importando si iba con Juan el Minipekka, María la Valkiria, o Roberta La Mosquetera, siempre desde que cruzaba el puente moría.
Montalvo el montapuercos, ya se sentía frustrado y estaba en depresión, sus archi-enemigos, eran tan buenos que lo atormentaban en sus sueños, La familia Larry Muerto de Dolores, El Barrio Volador, y por último, sus más temidos rivales, La Suegra Infernal, Nikola Tesla y Elka Ñon.
Hasta que un día... Montalvo resignado, arrastrado por su dios salió a la batalla, la última batalla antes de que Montalvo perdiera su brillo...
Pero... Hubo un silencio y Montalvo escuchó el sonido del viento cortándose a gran velocidad, qué era esto pensó montalvo, miró al cielo y no vio nada.
Distraido, no se fijó que salió la familia Larry, e inmediatamente salió cerró los ojos entregándose a la muerte pero...
Aquí no se acaba la historia... Del cielo cayeron un montón de flechas dejando solo en elixir a la familia Larry. Montalvo estaba cubierto de elixir, y también cubierto de felicidad y ánimo una vez más, así que Montalvo siguió su camino hacia la torre
Y murió como todo un guerrero luego de haber cumplido su cometido....
Así sucedió vez tras vez por un largo tiempo... Una y otra vez que Montalvo salía a la batalla. Montalvo y Las Flechas se hicieron amigos muy íntimos, donde quiera que iba Montalvo iban las flechas.
Sus archi-enemigos cuando lo veían venir decían, ''Oh no, ahí viene Montalvo y su Harem'', algunas veces las flechas salían en vano, pero otras veces eran la clave de la victoria.
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